Políticos y funcionarios del Ayuntamiento de El Ejido guardan un minuto de silencio por el fallecimiento de Antonio Arenas

Políticos y funcionarios del Ayuntamiento de El Ejido guardan un minuto de silencio por el fallecimiento de Antonio Arenas

Desde la Corporación Municipal del Ayuntamiento de El Ejido, el Cuerpo de la Policía Local y el Cuerpo de funcionarios de la Casa Consistorial, se lamenta profundamente el fallecimiento de Antonio Arenas, funcionario en la Administración Local desde hacía 32 años.

Ante el fallecimiento de este empleado público, el equipo de gobierno, miembros de la Policía Local y funcionarios han guardado esta mañana un minuto de silencio en el Patio de Luces de la Casa Consistorial en señal de respeto y recuerdo “a un ejidense que ha destacado por su calidad humana y su gran generosidad y cuya trayectoria profesional ha resultado en todos estos años intachable y en la que siempre han predominado valores como la constancia, el esfuerzo y la honradez”.

 Antonio Arenas, de 60 años de edad,  tomó  posesión de la plaza de sargento de la Policía Local en 1983, donde introdujo importantes mejoras y modernizó este Cuerpo con la organización y planificación de los servicios y la creación de un reglamento interno.

Góngora ha recordado “el destacado trabajo y las importantes contribuciones de Antonio Arenas durante los 17 años que ejerció la Jefatura de la Policía Local, ya que durante esta etapa se crearon las patrullas rurales, la figura del inspector fiscal y urbanístico, se incrementó la plantilla policial para poder dar cobertura a todos los núcleos de población, se implantó la Escuela de Policía de El Ejido, se crearon las juntas de seguridad y se firmó el primer protocolo de actuación conjunta entre Policía Local y Policía Nacional”.

El 31 de julio de 1998 pasó a ser jefe adjunto en la Policía Local y el 5 de julio de 2000 se incorporó a la concejalía de Agricultura y Medio Ambiente para asumir las responsabilidades derivadas de la disciplina rural, donde hasta su fallecimiento en el día de ayer desempeñaba las labores propias de su puesto.