Bego, natural de El Ejido, tiene un amplio bagaje dentro del mundo del balón a pesar de su juventud, 17 años. Comenzó siendo una niña, jugando para el ya desaparecido Ejido Fútbol Sala. Tras la desaparición de éste, tuvo que marcharse a Vícar para poder seguir disfrutando de su deporte.

La temporada pasada fue una de las artífices de que reapareciera el fútbol sala en la ciudad del poniente almeriense. De hecho, fue una de las jugadoras más importante de la temporada con sus goles y su desequilibrio dentro del campo, dejando muestra de su calidad y sus ganas de jugar con su conocida celebración "calamardo".

Cervilla comenta que "estoy muy contenta de poder seguir jugando en el equipo de mi pueblo. La temporada pasada tuve algunos altibajos, pero esta temporada voy a darlo todo para poder llevar a El Ejido a su lugar".
Desde el club, están más que satisfechos con esta renovación. "Renovar a Bego era una de nuestras prioridades. Es una jugadora de mucha calidad, desborde y equilibrio. Si conseguimos que sea capaz de mantener su nivel en todos los partidos, será una pieza fundamental para nosotros".

Así, el equipo ejidense tiene más de media plantilla cerrada.