Los primeros minutos del encuentro no encontraban dueño del balón, ya que el ritmo del partido era lento y, a pesar de que el CD El Ejido era el que quería tener el control del esférico, el River Melilla no dejaba hacer a los celestes. Sin embargo, después de 20 minutos, los de Alberto González se acercaban con más exactitud al área rival, hasta que en el minuto 22, se abría el marcador con un gol de Alfonso, que tras un rechace de Darío Guti, el balón se quedaba suelto en la frontal del área para que el motrileño lograra mandar el esférico al fondo de las mallas. A partir de ahí, el River Melilla desapareció y solamente llegaban ocasiones ejidenses, de hecho, la de Darío Guti, solo delante del portero, fue una de las más claras de la primera mitad. En el minuto 30 llegaría el segundo gol local, ya que Javilillo entraba solo por la banda izquierda, adentrándose con un buen regate en el área y logrando batir al portero por su palo izquierdo.
Cada vez más, el equipo de Alberto González está logrando fabricar su propio estilo de juego, gracias al trabajo y la constancia. Prueba de ello ha sido el propio gol de Darío Guti en el minuto 39, ya que gracias a la fuerte presión realizada sobre el portero visitante, Guti logra quitarle el balón y, tras deshacerse del guardameta, consigue el tercer tanto celeste. 3-0 y descanso en Santo Domingo.
La segunda mitad comenzó con dominio ejidense y en el minuto 6 llegaba la primera ocasión clara para el CD El Ejido a través de un disparo raso de Gabri desde fuera del área y que se iba desviado.
En el minuto 15, Rubén Guti lanzaba un corner por el lado derecho hacia el segundo palo por donde aparecía, solo, Admonio para, con un cabezazo de libro, conseguir el cuarto gol de la tarde.
El partido estaba totalmente roto, con un equipo ejidense dominando el encuentro y con un Rivee Melilla incapaz de pasar del centro del campo. Las ocasiones celestes continuaban sin cesar y eso se materializó en el quinto gol de la tarde por parte de Darío Guti, que de nuevo, tras el robo de balón al último defensor visitante, conseguía regatear al portero y sumar su segundo gol personal de la tarde. Casi al final del partido llegó el secto de las botas de Rafa.
Todo estaba hecho y ya el ritmo de ambos equipos bajó. Final del partido y victoria para los ejidenses, que dejan muy buenas sensaciones, una vez más, ante su afición.
Elena Sánchez