El pantano, que se encontraba en el nivel de agua más bajo de los últimos diez años, ha conseguido mejorar considerablemente su situación, al pasar de los 5 hectómetros cúbicos que albergaba el lunes 21 de noviembre a los 11 que embalsa una semana después.
La mejora es más que importante. Hace tan solo un año, en la misma semana, Benínar tenía embalsados solo 4 hectómetros cúbicos de agua, ahora tiene el triple. Los datos son, incluso, mejores que en la media de los últimos diez años, que está fijada para la misma semana en 8 hectómetros cúbicos, cuatro menos que los que retiene el pantano en la actualidad.
En un contexto de déficit hídrico creciente que están sufriendo los regantes del Poniente, el incremento importante del agua embalsada en Benínar es un alivio y acrecienta la esperanza de que no se haya tratado de un episodio aislado de lluvia y que el presente año meteorológico venga protagonizado por un incremento de las precipitaciones.
Rafa Villegas