Pregunta.- ¿Cuántas ciudades han podido disfrutar ya de esta obra?
Respuesta.- Hemos estado en muchísimas ciudades y pueblos. Entre ellos Madrid, A Coruña, Vigo, Ourense, Gijón, Córdoba, Sevilla, Málaga, Jaén, Valladolid, Alcorcón, Soria, etc. Prácticamente hemos visitado todas las ciudades de España. Hace dos años que comenzó la gira y no hemos parado.
P.- ¿Cómo afrontan la participación de cara a la actuación de este viernes, 23 de febrero, en el Teatro Auditorio ejidense? ¿Por qué aquí?
R.- Esperamos que haya mucho público, porque seguro que va a gustar. Con respecto al destino puedo decir que como lo nuestro es hacer teatro y me encanta viajar, pues cuantos más sitios mejor, y El Ejido en esta ocasión es uno de ellos, ya que apuesta por la difusión de la cultura constantemente.
P.- En una frase, ¿cómo definiría 'La velocidad del otoño'?
R.- Es una comedia agridulce. Tiene un humor muy inteligente, con una crítica muy ácida y graciosa. Es una obra que refleja la vida misma. El que vaya se va a sentir identificado porque, la verdad, toca la fibra. Además, el público va a reflexionar sobre la familia, la edad y la libertad de las personas mayores a decidir como vivir hoy en día.
P.- Entonces, ¿por qué debería acudir el público ejidense a ver esta pieza teatral llena de energía? ¿qué le va a aportar?
R.- Deberían acudir porque es una obra que les va a enriquecer muchísimo. Además, se sentirán identificados con ella, y bueno, decir que podrán ver a Lola Herrera sobre el teatro, gran compañera mía. Pero, sobre todo que vayan a vernos porque van a salir contentos, a flor de piel tras haber experimentado muchas sensaciones y emociones en cada momento. En definitiva, no se pueden perder una obra llena de amor y poesía como esta, donde la gente conectará desde el principio.
P.-¿Qué recorrido tienen previsto realizar después de visitar El Ejido?
R.- Este sábado, 24 de febrero, llevaremos la obra también a Marbella. Será la última actuación y con ella cerraremos una gira de casi dos años de duración.
P.- Los espectadores podrán disfrutar tanto de su interpretación como de la de Lola Herrera en el escenario, ¿cómo es que han vuelto a coincidir gos grandes actores como ustedes tras realizar 'Seis clases de baile en seis semanas'?
R.- La realidad es que nos sentimos tan a gusto con la otra función. Surgió mucho cariño entre nosotros y cuando la obra la vio Lola con Jesús Cimarro, pensó en mi y estábamos deseando volver a trabajar juntos. Cuando me la ofrecieron yo ya sabía que si Lola la había visto y les había gustado a los dos era muy difícil que no me gustara también a mi y no hacerla con Lola.
P.- En definitiva, ¿cuál es el mensaje que se quiere transmitir al público con la obra, su guión, escenificación, dirección e interpretación?
R.- Si el público quiere disfrutar, vivir y sentir un trocito de vida esta es una obra ideal, como la vida misma. Pueden venir espectadores desde los 16 años en adelante, porque estoy seguro de que realmente les va a enriquecer. Van a salir después de la función con una energía increíble, que les va a venir muy bien, y a su vez, les va a hacer reflexionar sobre las cosas de la vida.
Andrea Salvatierra
