“Decidí quedarme en Matagorda por la estabilidad que me suponía”

“Decidí quedarme en Matagorda por la estabilidad que me suponía”

Esta semana D-Cerca ha entrevistado a Pedro Merlo, nacido en Padul y residente en Matagorda
Pregunta. - ¿Nació usted en Almería?
Respuesta. -Aunque llevo muchos años en Matagorda nací en Padul, pero por trabajo decidí venirme a vivir a esta zona, ya que allí tenía que estar ‘de arriba para abajo’ y me cansé de tener que viajar con tanta frecuencia, iba a Francia y Valladolid, entre otros muchos destinos. Eché una campaña de tomate en esta zona y me gustó, por eso decidí quedarme, ya que aquí encontré la estabilidad que buscaba después de casarme.
 
P. -¿Va a visitar su pueblo con frecuencia?
R. -Sí, voy a menudo ha visitarlo. Allí vive mi madre, todos mis hermanos, que en total somos 5, y mientras mi madre viva seguiré yendo, cuando ella no esté seguramente iré menos. Pero ahora si no voy tanto como me gustaría es porque no hay tiempo, porque me encanta ya que soy más de sierra que de playa, hace muchos años que no ‘piso’ el agua de la playa.

P. - ¿Le ha gustado trabajar en el campo?
R. - Más que gustarme es lo que tocó. Antes no teníamos muchas posibilidades de elegir, pero como no tuve la oportunidad de estudiar, tampoco hubiese podido elegir otra cosa, esa era la única opción. En aquellos tiempos la cosa estaba mal, aunque había quien sí podía permitirse estudiar, pero eran otras familias. 

P. - ¿Cómo conoció a su mujer?
R. - Ella era de mi pueblo, la conocí en casa de una de sus tías, durante una matanza. Allí comenzamos a bailar y, aunque la conocía antes de ese día, ahí empezó nuestro romance. Fruto de nuestro amor hemos tenido dos hijas y un hijo, que me han dado, a día de hoy, ocho nietos. Tengo la suerte de que viven cerca y disfruto mucho de ellos. 

P. - ¿Hizo la mili?
R. - Sí. en Melilla, en el Parque Móvil de la Artillería, estuve 12 meses allí y 3 en Almería. Para mí estos meses fueron una pérdida de tiempo, porque para quien vaya soltero es diferente, es una buena experiencia, pero cuando me tocó ir a mí ya tenía a mi hija mayor y se me hizo demasiado largo, aunque tuve ocasión de venir un par de veces, una cuando operaron a mi mujer, que me dieron un mes de permiso, y cuando fue mi turno para cogerme el permiso que nos correspondía.

P. - ¿Cómo fue vivir aquella época? 
R. - Se vivieron muchas cosas cuando Franco estaba en el poder, ese tema, la verdad, es que es delicado. La gente de hoy realmente no sabe cómo fue esa época, pero los que la hemos vivido con él sí. Una de las cosas buenas que tenía era que lo que ganabas era para ti, ahora entre unas cosas y otras se te queda medio sueldo, este es uno de los motivos por los que me gusta la vida que viví con Franco. En lo referido al trabajo era igual de duro que como puede ser ahora. Muchos dicen que mató a inocentes, pero él no mató a nadie, sino los que había a su respaldo.

¿P. - Le hubiese gustado vivir su juventud ahora?
R. - No, a mí me gustó vivirla en mis años. La vida que he tenido realmente ha sido muy buena, he trabajado mucho, pero también he tenido tiempo de divertirme, por eso me gustó vivirla en aquella época.

P. - ¿Cómo se divertía?
R. -Me encantaba irme de bailes. Cuando llevaba el Club de la Tercera Edad de Matagorda, que fue durante 19 años, al cerrar me iba de bailes, a tarambana o a donde surgía y a día de hoy sigo yendo cuando puedo.
 
P. - Desde que tiene más tiempo libre, ¿qué le gusta hacer?
R. - Realmente llevo jubilado 36 años, por enfermedad. En el 1990 me prejubilaron y en el 1994 me dieron la paga total. No me costó mucho adaptarme porque cogí el club, y desde hace unos 5 años que lo dejé, me ha tocado vivir. Me gusta echarme la partida de cartas o jugar a la petanca. Además, viajo bastante con mi mujer, hemos estado en Badajoz, en balnearios, en varias provincias de Andalucía, pero de todos me quedaría con Sevilla,  aunque lo que más he visto y disfrutado ha sido Benidorm. Para ver toda España hace falta tener buena cartera, pero como la mía es pequeña y está ya vieja no se le puede meter mucho dinero y cada vez viajamos menos. También hemos salido fuera de España, hemos visitado Bélgica y algún que otro sitio más. 

P. - ¿Qué diría usted que es necesario que vaya a mejor en la sociedad de hoy? 
R. - Los robos y la delincuencia en general. Hoy te encuentras fácilmente un parque lleno de botellas de alcohol vacías y, por la mañana, aparecen  coches atravesados en medio de la calle. Antes también hacíamos ‘gamberradas’, pero sin hacer daño, solo por reírnos. Por ejemplo, recuerdo cuando era pequeño que nos uníamos una cuadrilla y cogíamos un carro de los mulos y lo cambiábamos de sitio, a pesar de que pesaba muchísimo y costaba moverlo, pero lo cambiábamos de calle para echarnos unas risas, pero no destrozábamos nada.

P. - ¿Algún consejo para la gente que lo lea?
R. - No sabría ni que consejo darles, porque la juventud no suele escucharlos, no entienden que, después de tantos años vividos ya tenemos una experiencia y las cosas que les decimos es por su bien y basados en nuestras vivencias.