Maddox Centro Óptico: principales consejos para elegir las gafas adecuadas en niños

Maddox Centro Óptico: principales consejos para elegir las gafas adecuadas en niños

Detectar precozmente los problemas de visión de nuestros hijos es fundamental. Debido a que los niños muchas veces creen ver adecuadamente, lo correcto sería una revisión periódica al óptico-optometrista.
A partir de ahí, los mejores consejos para elegir las gafas adecuados para los pequeños son:
-Transmitir buenas vibraciones acerca de llevar gafas. El niño no debe verlo como un defecto o posible objeto de burlas. 
-El material adecuado para la montura debe estar caracterizado por la ligereza, la comodidad y la seguridad. Para los menores de cinco años se recomienda la silicona debido a su flexibilidad y su resistencia a roturas.  Cuando se hacen mayores, el acetato es una buena opción ya que disimula mejor el grosor de la lente y suele ser igual de resistentes. Las monturas metálicas infantiles también suelen proporcionar una buena seguridad. Los niños con problemas de alergia al níquel deben usar monturas de titanio.
–Las lentes infantiles se recomiendan siempre orgánicas, ya que es un material que no pesa y su resistencia al impacto es bastante alta. Existen materiales orgánicos específicos de alta resistencia a las roturas que multiplican, hasta por 10, la dureza base.
-Los tratamientos antirayaduras o antireflejantes mejoran la calidad de la superficie óptica y cuidan los ojos del pequeño. Si la graduación es alta, sería aconsejable optar por el cristal más reducido posible por el peso, comodidad y estética de las gafas.
–La gafa debe cubrir perfectamente el campo de visión. A medida que crecen, deben ir cambiando sus gafas ineludiblemente.
– Es importante utilizar unas gafas que estén bien ajustadas por detrás de las orejas para que no se caigan con facilidad o usar stoppers en las patillas o una cinta elástica. Además, los puentes nasales deben ser ajustables y blandos y tener la mayor superficie de contacto para que el peso de la montura esté bien distribuido y no haga daño. 
–Existen monturas deportivas especializadas para cada tipo de actividad  que mejoran el agarre, el comfort, la seguridad y los campos visuales. 
–Es prioritario tener unas gafas de recambio, sobre todo si la graduación del niño es elevada. 
Asimismo, es importante que el niño acuda periódicamente a las revisiones con el óptico-optometrista con el objetivo de evaluar si el sistema visual infantil funciona correctamente o si se observa alguna alteración que pueda derivar en mayores problemas o bajo rendimiento escolar. Esto adquiere mayor importancia si percibimos algunos síntomas como desinterés, dolores de cabeza, seguimiento de la lectura con el dedo, confusión de letras, guiños y/o posturas extrañas. Más información en www.tuoptometrista.com