Los menores han realizado un recorrido por las instalaciones del laboratorio, considerado punta de lanza tecnológica en la provincia, ya que se trata de una herramienta imprescindible para garantizar la trazabilidad y seguridad alimentaria no sólo de la producción agrícola sino también del agua para consumo humano, de las playas y piscinas, así como de los recursos hídricos con los que cuenta el municipio en general.
El encargado de acompañar a los escolares en esta visita ha sido el jefe de área de Agricultura, Antonio Escobar, junto a la directora del CUAM, Nuria Sánchez, quienes han explicado cómo se trabaja en estas instalaciones municipales, donde se analizan más de 250 materias activas diferentes, de las que 230 se encuentran acreditadas y que, además, cuenta con el certificado de calidad QS que garantiza el control de las frutas y hortalizas en todas las etapas de la producción.
Los alumnos han realizado un recorrido por las distintas secciones que componen las tres áreas de ensayo en las que se encuentra dividido el laboratorio como son microbiología de alimentos, dentro de los protocolos de análisis de riesgos y control de puntos críticos; la sala de recomposición, donde se preparan los viales para las analíticas de residuos de plaguicidas en frutos y la sala de cromatografías de gases y líquidos.
Por último, recordar que la finalidad de estas visitas es que los escolares conozcan, de primera mano, el alto grado de tecnificación al que se encuentra sometido este importante laboratorio durante los últimos años, así como todos los servicios que presta tanto a agricultores como a empresas de la comarca.