Una ola de solidaridad da esperanza a una mujer y sus cinco hijos en Santa María del Águila

Una ola de solidaridad da esperanza a una mujer y sus cinco hijos en Santa María del Águila

Los vecinos se han encargado de que no pasen hambre, como hasta el momento, y dos personas le han comprado una lavadora
Vecinos de Santa María del Águila se unieron la semana pasada para ayudar a una mujer y sus cinco hijos sin las necesidades básicas cubiertas. La voz de alarma saltó cuando el mayor de los cinco hijos de una mujer malagueña que reside en Santa María del Águila desde el mes de diciembre intentó vender su Play Station por las casas de este núcleo de población ejidense. Preguntado por el motivo de la venta, el niño de 12 años aseguró que no tenían para comer. 
 
Una ola de solidaridad
La ola de solidaridad ha sido más que importante, no solo con los vecinos proporcionándole alimentos, ropa y comida. Publicada la información en www.d-cerca.es y en las redes sociales de este medio de comunicación el pasado viernes, tras leer la información, dos compañeros de trabajo de una empresa de exportación agrícola de Santa María del Águila, Serafín López Pizarro y Flavia Florea, se ofrecieron de inmediato a comprarle una lavadora a la familia. Además, una vecina, que tiene un establecimiento de electrodomésticos se comprometió a hacerles un buen precio. En la tarde del pasado viernes ya tenía en su casa la lavadora.

Serafín López Pizarro explicó a D-CERCA que “cuando leí la noticia en vuestra página web se me partió el alma y tuve claro que tenía que hacer algo”. Además de la lavadora, López Pizarro y Flavia Florea también donaron a la familia pañales para la hija más pequeña, leche y otros productos de primera necesidad.

Las mujeres del núcleo, que estaban ya aportando dinero para poder comprar una lavadora decidieron hacer uso del mismo para adquirir un vale en el Supremo de La Aldeílla para que la madre pueda comprar diariamente alimentos para sus cinco hijos mientras se concretan las ayudas de Servicios Sociales.

El alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, también se cercioró, vista la información, de que Servicios Sociales ponga en marcha sus programas de acción para ayudar a la familia a salir de esta situación. También llegaron muestras de apoyo y colaboración desde trabajadores de Servicios Sociales de otros municipios, que se ofrecieron a hablar con sus compañeros de El Ejido.

La madre de los cinco menores, Ana, se mostró muy agradecida ante tantas muestras de solidaridad y explicó a D-CERCA que su madre, que vive en Balerma, tiene una pequeña pensión y con lo poco que le queda tras pagar alquiler y sus gastos “siempre me ayuda aunque sea con 20 euros”. Sin embargo, un problema con el banco hizo que la familia pasara unos días para olvidar que se han visto compensados con la solidaridad y cariño de todo el pueblo.

Ana explicó a D-CERCA que incluso recibió el fin de semana hamburguesas para toda la familia de la Perry Burguer o chucherías de otra empresa para sus niños. La joven malagueña está en busca de un trabajo y explicó que “en cuanto pueda entrar en una comercializadora dejo a los niños con mi madre y voy a trabajar”. Ana no cobra prestación alguna y asegura que “ya recurrí a los Servicios Sociales, que me mandaron alimentos, pero esta vez me dijeron que no podían hacer nada hasta mayo”. La publicación de la información y el compromiso del alcalde hicieron que también se desplazaran a su casa personal de Protección Civil para llevarle alimentos. Los niños de Ana tienen 12 años el mayor, dos niñas de 10 y 8 años, un niño de 6 y una pequeña de 2.
 
Ayuda parroquial 
Nada más conocer la situación, mujeres del núcleo se pusieron en contacto con Don Mariano Delgado, su expárroco, actualmente en la Parroquia de San Isidro Labrador de El Ejido. El sacerdote activó rápidamente el protocolo de ayuda de Cáritas Parroquial y le hizo llegar cajas de frutas y hortalizas donadas por agricultores del municipio. Del mismo modo, Cristina, una de las vecinas que está colaborando, explicó a D-CERCA que “también se ha ofrecido a colaborar en lo que sea necesario el presidente de la Junta Local de Santa María del Águila, Juan Carlos Brabezo”.

Además, como no podía ser de otra manera, también procedieron a comunicar la difícil situación que atraviesa la familia al Área de Servicios Sociales del Ayuntamiento de El Ejido.

No han conseguido ayuda, al menos de momento, según explicaron a D-CERCA de Cruz Roja. Y es que, según les aseguraron desde la institución humanitaria, por el Estado de Alarma les está resultando muy complicado ejercer su labor, ya que les piden infinidad de papeleo.

La joven madre, que fue abandonada por su pareja y decidió emprender una nueva vida en Santa María del Águila, según han explicado a D-CERCA mujeres que le están proporcionando ayuda, ha expresado su voluntad de encontrar un trabajo para poder mantener a su familia. Se trataría, sin lugar a dudas, de la guinda a una historia que ha conmovido  a toda la comarca y que ha supuesto una demostración más de que el municipio de El Ejido es solidario.
 
Desgarradora historia 
La situación se conoció el miércoles de la semana pasada a raíz del intento de venta de una video consola Play Station por parte del hijo mayor para poder comer, los grupos de Whatsapp, primero, y la información publicada en www.d-cerca.es hizo que corriera la noticia como la pólvora y se diera paso a una enorme ola de solidaridad.

En un primer momento, los vecinos, informados también a través de, por ejemplo, el grupo de Whatsapp de los padres de alumnos del IES Santa María del Águila, se pusieron de inmediato manos a la obra para conocer la situación de esta familia y ayudarles en todo lo necesario. Según ha podido saber D-CERCA, los niños tenían evidentes síntomas de estar pasando hambre. Es más, ante la falta de leche para su hija pequeña, de dos años, la madre, de unos 30 años de edad, se vio obligada a prepararle unas lentejas por la noche para comer.

Las vecinas cuentan que la ropa que llevaban los niños tampoco estaba en las mejores condiciones. Y es que la joven madre , como ya se ha adelantado, no tenía tampoco lavadora. Es por ello que, hasta el pasado viernes, al menos durante dos días, mujeres de Santa María del Águila se encargaron de lavarles la ropa.

Cristina es una de las mujeres que está colaborandoy  fue la persona que difundió el mensaje de lo que ocurría en el grupo de Whatsapp de los padres del IES Santa María del Águila, con una respuesta solidaria muy rápida. Esta mujer se ha estado encargando de recibir en su casa todas las donaciones de comida, ropa y juguetes que le hacen llegar a la familia.

Cristina explicó que “nos hemos enterado de la situación a raíz de que el hijo mayor intentara vender la consola, la madre no pidió ayuda”. Muchas veces en situaciones tan duras entran en juego muchos factores como la vergüenza.
 
Rafa Villegas