El equipo celeste tuvo algunas dificultades en la primera parte para dominar el juego y el esférico, en una jornada matinal con fuerte viento, que dificultaba el desarrollo del partido, y al que llegaban además con bajas importantes como la de Miriam Céspedes y Lorena, que arrastran molestias, pese a las cuales se sentaron en el banquillo.

Las visitantes consiguieron adelantarse en el marcador a los 9 minutos de juego aprovechando un balón en largo a la espalda de la defensa, como intentaron durante la mayor parte del encuentro.

Con el gol, los nervios empezaron a cundir entre el cuadro celeste. Sin embargo, consiguieron templarlos y Cristina Navarro apareció en el minuto 30 para establecer el empate en el marcador. Un gol que dio tranquilidad y que permitió a las ejidenses comenzar a tocar más el balón y realizar mejor los desplazamientos, manteniendo la línea defensiva atrás, para evitar esos huecos de inicio.

El empate duró poco en el marcador, ya que en el 33 volvía a adelantarse el Pavía B. Una ventaja que mantuvo hasta la recta final de la primera parte, donde de nuevo Cristina Navarro, que firmó cinco de los seis tantos de su equipo, volvía a marcar.

Tras el descanso, Lorena y Miriam entraban al partido para ayudar en la medida de lo posible en defensa. Un cambio que el equipo agradeció y que sirvió para que las celestes cogieran confianza. Tal fue así que a los 11 minutos, Ana marcaba el 3-2 con un gol a bocajarro y se producía un cambio radical al equipo, llegando los goles de la victoria.

El partido dejó además otras notas positivas como el hecho de que Cristina Navarro con sus cinco goles se aupa a la cuarta posición de máximas goleadoras de la categoría con 21 dianas esta temporada.

Asimismo, el técnico celeste, Alberto Pardo, también destacó el debut de la jugadora Smahane, que “jugó bien en el centro del campo y en la media. Jugó muy tranquila, se veía que quería jugar y que quería participar y eso es de agradecer porque es un futuro que viene pisando fuerte”.