El Pleno ordinario del
Ayuntamiento de Adra, celebrado en la tarde de este miércoles, ha llevado a
votación la propuesta de conceder al Cristo de la Expiración la Medalla de Adra
por el Día del Municipio de 2023. De manera unánime, todos los grupos políticos
que conforman la Corporación local han dado su “sí” para que esta imagen, que
cumple 400 años de historia el próximo ejercicio, sea condecorada con la mayor
distinción que otorga la localidad.
La propuesta, elevada
por el alcalde, Manuel Cortés, al Pleno de la Corporación Municipal, parte de
una petición de la Parroquia de la Inmaculada Concepción de Adra apoyada por la
totalidad de las Hermandades y Cofradías del municipio, y se había puesto, de
forma previa a la celebración de la sesión plenaria, en conocimiento y
dialogado con los grupos políticos que forman parte de la Corporación Municipal,
en junta de Portavoces, a fin de alcanzar el mayor consenso.
Como ha subrayado el
primer edil “la imagen del Cristo de la Expiración forma parte de nuestro rico
patrimonio cultural e histórico y es una de las piezas más relevantes del arte
sacro abderitana, por lo que en su 400 aniversario consideramos que merece ser
condecorada con la Medalla de Adra”, por lo que ha aprovechado para “felicitar,
tanto a la Parroquia como a los hermanos y hermanas del Cristo de la
Expiración”.
IV Centenario
Para celebrar este IV
Centenario, la Parroquia de la Inmaculada Concepción de Adra y la Cofradía de
la Expiración han confeccionado para el próximo 2023 una extensa programación
para conmemorar esta efeméride bajo el lema ‘En él está nuestra salvación. 400
años de amor’. Cabe destacar que esta imagen es el crucificado más antiguo de
la provincia de Almería, ya que los demás se perdieron durante la Guerra Civil,
mientras que este logró salvarse. También es la imagen más antigua de la Semana
Santa abderitana, que procesiona durante la noche del Jueves Santo junto a
María Santísima de los Dolores.
Data de 1623, tallada
por el imaginero granadino Alonso de Mena y Escalante, formando parte del
programa de reconstrucción de la Iglesia de Adra tras el asalto turco de 1620. Entre
2010 y 2011, el Cristo de la Expiración fue sometido a una profunda
restauración por parte de Enrique Salvo Rabasco, en la que recuperó su
policromía original.