A Alejandro Bouza se le acaba el tiempo ante el rechazo de “su público”

A Alejandro Bouza se le acaba el tiempo ante el rechazo de “su público”

A Alejandro Bouza, presidente de C.D. El Ejido 2012 de fútbol se le acaba el tiempo para pagar y se le agota el periodo para crear un equipo competitivo para la liga de la temporada próxima

El 30 de junio tienen que estar abonados todos los contratos federativos registrados de los futbolistas que han pertenecido al club en la temporada 2022-2023. Por otra parte, aún no hay entrenador que se haga cargo del nuevo equipo, y si lo hay no lo han dado a conocer, primero tienen que liquidar el contrato de David Cabello y, para eso, tiene un mes más; no obstante, nadie cree que el nuevo entrenador llegue en agosto y empiece a hacer el equipo para Tercera RFEF.

Además, ya ha dejado caer el presidente de la sociedad anónima deportiva ejidense que va a usar jugadores de la zona y está centrando su mirada en el equipo de Berja. Lo que realmente busca el argentino es no tener que pagar a los jugadores y evitarse el pago de los alquileres que tantos quebraderos de cabeza le han causado y que tanta deuda le ha generado este año.

A Bouza no lo cree nadie. Ha conseguido que sus correligionarios se le vuelvan en contra y, ahora, los que antes lo defendían en las redes sociales le piden que se vaya y deje al club en manos de empresarios locales.

Alejandro Bouza quiere vender un club que se ha devaluado tanto que no sabemos si hay comprador capaz de valorar una plaza en la quinta categoría del fútbol nacional español. El presidente va diciendo que va a pagar a los jugadores de la pasada temporada vendiendo el 50% de las acciones que posee por 120.000 euros, las mismas que a él le costaron 30.000 euros, según el capital social desembolsado para la constitución de la sociedad anónima deportiva que se encuentra pendiente de registro.

Por otra parte, iniciar la nueva temporada va a ser un dolor de cabeza y otro de barriga. Bouza ha perdido toda la credibilidad ante los aficionados, apenas 300 abonados y no todos pagan, ante las empresas, cada vez hay menos dispuestas a poner su dinero en forma de publicidad en nada que tenga que ver con este club por el descrédito sufrido tras el descenso. La sensación que hay en el Ayuntamiento de El Ejido sobre este club no es la mejor para recibir subvenciones, además, al convertirse en una sociedad anónima deportiva con un propietario privado como es Alejandro Bouza, desde el Consistorio ejidense se van a plantear si dar subvenciones o ayudas a un empresario privado.

Por otra parte, algunas categorías han dejado de pertenecer al club como ha sucedido con toda la sección femenina, la cual, también ha de recibir ayudas municipales que deben ir en detrimento del club de Bouza. No es de imaginar que desde el Ayuntamiento ejidense abandonen a su suerte a todas las jugadoras que estuvieron en Santo Domingo. Así mismo, mucho padres se plantean llevarse a sus hijos al otro club local, el Poli Ejido CF, entre otras cosas porque resulta más barato tener a los niños practicando este deporte.

El clamor popular de afición, empresarios, abonados, futbolistas locales y algunos miembros de la estructura actual de lo que queda del club están pidiendo a gritos la marcha de Alejandro Bouza, no obstante, el argentino quiere recuperar el dinero invertido, pero la devaluación del club tras el descenso no da para tanto. El tiempo lo dirá, mientras tanto sigue este lamentable espectáculo.


José Antonio Gutiérrez