“El verdadero pregonero de este año es el Área de Cultura, yo solo represento el trabajo de 40 años”

“El verdadero pregonero de este año es el Área de Cultura, yo solo represento el trabajo de 40 años”

Gabriel Martín Cuenca nació en la ciudad de Almería, aunque desde muy joven se mudó junto a su familia al municipio de El Ejido. Desde entonces, ha contribuido al desarrollo de la sociedad ejidense vinculando su nombre, tanto en lo profesional como en lo personal al mundo de la cultura. Este año, Gabriel Martín Cuenca entonará el pregón de fiestas de San Isidro con un mensaje claro para todos sus vecinos.

-Pregunta: Brevemente, ¿cuál ha sido su trayectoria vital y su conexión con El Ejido?

-Respuesta: En el año 1969 mi familia se traslada de Almería a El Ejido. Yo fui estudiante del instituto de Santo Domingo en los años 70 donde formé parte del grupo Los Juglares que, de algún modo, dio lugar a los inicios de la Muestra de Teatro Aficionado. Más tarde el Círculo Recreativo asumió su gestión y, al volver de la universidad, un grupo de trabajadores, vecinos y estudiantes retomamos la Muestra, que en aquel momento era escolar. Esa fue mi vinculación como aficionado a la cultura y los movimientos sociales hasta el año 84, cuando me incorporé como trabajador al Ayuntamiento.


-P: ¿Cómo son esos inicios en el Área de Cultura del Ayuntamiento?

-R: Empiezo de becario en el año 83 y en enero del 84 llega el primer contrato. Por mi formación en lengua y literatura debería haber sido profesor, pero me ofrecieron incorporarme como bibliotecario municipal y decido apostar por El Ejido. Mi primer trabajo fue como bibliotecario, de manera que fui el primer trabajador profesional de lo que hoy es el Área de Cultura del Ayuntamiento. En aquellos años la biblioteca la concebimos como un centro de animación socio-cultural.


-P: Finalmente dedicó su carrera profesional a la cultura, ¿durante cuántos años?

-R: He trabajado unos 35 años en el Ayuntamiento. Hubo un tiempo que me fui a Diputación y dirigí durante tres años el Instituto de Estudios Almerienses y, Servicios Sociales de la provincia, un año. En 1991 vuelvo a El Ejido.


-P: ¿Qué destacaría de todo este tiempo?

-R: Los años 80 y 90 fueron muy creativos, de tomar iniciativa porque se estaba creando todo. Fueron muy intensos en este sentido porque, además, no había recursos. Teníamos ansia por crear conciencia de identidad, hay determinados acontecimientos culturales que, aunque uno no lo consuma, se siente orgulloso de que existan. Creo que algo parecido ocurre con el Festival de Teatro de El Ejido. Eso ayuda a sentirse identificado y parte de algo y si tuviese que destacar algo sería aquella época de creación.


-P: El gusto por el arte y la cultura, ¿le viene de familia?

-R: Mi padre era una persona con formación y cierta cultura, pero la verdad es que no creo que nos venga, necesariamente, de familia. Es cierto que mi hermano tomó la iniciativa cuando le dijo a mi padre que quería hacer cine en aquellos años. Mi hermana también fue presidenta un tiempo de la Asociación Rosa Chacel…así que, sí, es verdad que siempre hemos tenido vinculación con la cultura, pero no tengo muy claro de dónde viene.


-P: ¿Cómo recibe la noticia de que será el pregonero de San Isidro?

-R: Con cierta sorpresa, aunque suene a tópico. Creo que el pregonero este año realmente es el Área de Cultura. El Equipo de Gobierno quizá ha pensado en mí como representante del área por haber trabajado ahí desde que se creó hace casi 40 años, pero el reconocimiento es al trabajo que se hace desde el área. Voy a representar a 40 años de trabajo del equipo del Área de Cultura.


-P: ¿Qué mensaje quiere transmitir con este pregón?

-R: Lo único que puedo hacer es expresar, a mi manera, mis sentimientos y emociones. De alguna forma, será una alabanza al esfuerzo de El Ejido pero también una reflexión crítica porque tenemos que saber ver los errores que cometemos. Los pueblos avanzan con su esfuerzo, con su inteligencia y con su innovación, pero también cometiendo errores, asumiéndolos y aprendiendo de ellos. Ese es el mensaje que quiero transmitir, que permanentemente queramos ser mejores.


Noelia Martín