No en vano, José Antonio Peña, portavoz de la Mesa, recordó que el informe de impacto ambiental es un paso que puede alargarse “hasta dos años en algunos casos” y aseguró que “la playa de Balerma no aguanta más”. En este sentido, en declaraciones a D-CERCA, se refirió a las conclusiones del informe de la Estrategia marina para la Protección de la costa en las provincias de Cádiz, Málaga y Almería, elaborada entre los años 2019 y finales de 2021, donde ya se ponía de manifiesto que la actuación entre la rambla de Balanegra y la rambla del Loco debía ser “prioritaria a corto plazo”. Por todo ello, desde la Mesa de Trabajo insisten en que “cuando se resuelvan todos los pasos burocráticos, el estado de la playa ya será crítico o de imposible recuperación”.
Insisten también en que su petición es perfectamente legal. José Antonio Peña afirmó que “no planteamos que se hagan las obras sin ninguna garantía, sino que se haga un informe sobre la viabilidad de excluir de la evaluación ambiental, y lo pedimos porque la playa de Balerma no resiste dos años más de temporales y porque además la Ley 21/2013 la contempla”.
Desde la asociación esperan recabar apoyos suficientes a la medida propuesta para que la ministra del MITECO la eleve al Consejo de Ministros y cuanto antes se liciten las ansiadas obras para recuperar las playas de Balerma. Así, incidían que en "esta decisión se suman los criterios técnicos pero también la voluntad política", y esperan que ambas cuestiones se unan para salvar cuanto antes la playa balermera.
Publicación del estudio completo
Por su parte, también este viernes 22, el alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, ha pedido a la Dirección General de Costas que publique en completo el ‘Estudio para la Recuperación Ambiental del Litoral de Balerma’ para poder analizar todas las alternativas planteadas.
Francisco Góngora han mostrado su preocupación por la solución escogida que pasa por la construcción de contención de 785 m de longitud y 2.5 metros de altura en Las Cuevecillas: la aportación de casi un millón de m3 de arena de un fondo marino a 23 km de la costa y la construcción de un espigón de 40 metros perpendicular a la línea de costa, en la Rambla del Loco.
A pesar de haber solicitado toda la información, “no hemos recibido el estudio para poder contrastar, consultar, analizar todas las alternativas y plantear alegaciones en el caso de que sea necesario ya que somo escépticos en que la solución escogida pueda estabilizar un tramo de 6 kms de playa”.
La experiencia de la dinámica de la mar indica que “va a seguir moviendo la arena en sentido Almerimar y va a seguir habiendo un proceso de erosión a levante del último espigón de Balanegra y a levante del nuevo de la Piedra del Moro. Por ello, seguimos insistiendo que queremos una solución estructural y definitiva de estabilización que no requiera mantenimiento y movimientos anuales de arena”.
Por último, ha puntualizado que “en el tramo comprendido entre La Rambla de Balanegra y la Peña del Moro, han existido 35 metros de ancho de playa seca durante años y que la erosión más importante, salvo el tramo entre la Torre y la Lonja, se ha producido a partir de la construcción de los espigones de Balanegra, no hay que remontarse al año 1957”.
Góngora entiende que “puede haber condicionantes ideológicos por parte del Ministerio hacia la construcción de espigones u otra actuación que suponga rigidizar cualquier tramo de costa”.
Almudena Fernández