"La búsqueda ha terminado sin ningún resultado positivo". Con esta frase sentenciaba la familia de Juan Andrés Barranco, desaparecido hace más de tres años en el municipio de Adra, la batida de búsqueda organizada el pasado domingo, 1 de octubre. 

Los familiares del desparecido, junto con miembros de la Asociación Guardias Civiles Solidarios (AGCS), y los voluntarios de la asociación Adonay y de la Federación de Detección Deportiva de Andalucía, volvieron al Paraje Rabanillos, en el término municipal abderitano, para buscar pistas que pudieran ayudar a revelar el paradero de Juan Andrés. El dispositivo, que contaba, con aparatos detectores de metales y los utensilios propios que usan sus operadores, un drone de la AGCS y un nuevo vehículo todo terreno donado hace unas semanas por los Veteranos del grupo de Acción Rápida de la Guardia Civil VGAR, se vio retrasado y en parte truncado porque coincidió con la II Edición del evento ciclista BTT 'La Fundición', que les impidió inspeccionar a fondo algunas de las zonas. 

"El equipo era muy bueno, y estamos muy agradecidos con todos", trasladan desde la familia a D-CERCA, para luego explicar que "hay dos pozos dentro de esta zona donde desapareció Juan, y vamos a hacer hincapié en que deben explorarse a fondo". Además anuncian que "vamos a programar más acciones y búsquedas como esta, esperemos que antes de que acabe el año". 

Los familiares de Juan Andrés han deseado "agradecer a todas las personas que han intervenido en la batida, la AGCS, la asociación Adonay, la Federación de Detección Deportiva de Andalucía y el Ayuntamiento de Adra". También a la delegación de patrimonio histórico de Almería por resolver a favor y de forma urgente la petición colectiva para llevar a cabo este tipo búsqueda. 

Juan Andrés Barranco fue visto por última vez el 21 de febrero de 2020 en Adra. En aquel entonces tenía 40 años, medía 1,55 metros de altura y pesaba unos 50 kilos. Vestía una chaqueta de piel de color negro, pantalón gris y zapatillas de color negro.

El trabajo de la AGCS

"Mantener viva la búsqueda de Juan Barranco y de otras muchas personas, es darles esperanzas a sus familiares, y hacerles ver que no están solos en el calvario por el que están pasando, ellos lo agradecen enormemente y nosotros nos debemos a ellos, su familia no ha dejado de buscarlo desde su desaparición y han intentado por todos los medios saber que le puso pasar o donde estará" declaran desde la Asociación de Guardias Civiles Solidarios.

La UAS-SAR de los Guardias Civiles Solidarios colabora desde hace años en la búsqueda de personas desaparecidas mediante el uso de drones aéreos, ROV submarinos o detectores de metales; han creado un modo de trabajo único, el método AGCS que permite a cualquiera de sus pilotos voluntarios realizar sus funciones y aquella que se le encomienden en cualquier Puesto de Mando, una sola persona puede gestionar la emergencia, realizar vuelos, organizar a los voluntarios desde el lugar o en la distancia como programar los vuelos a realizar desde cualquier lugar del mundo, todo ello se imparte sobre una formación que han de superar los pocos pilotos con los que cuenta en la que es su propia operadora y que una vez superada se consiguen las alas de piloto UAS-SAR.

La Asociación de Guardias Civiles Solidarios es una Organización No Gubernamental creada en el 2003 en Granada, con múltiples delegaciones en España, han realizado más de 400 campañas solidarias del tipo humanitario tanto a nivel nacional como internacional, y siempre gracias a la colaboración tanto de su voluntariado, como de las aportaciones altruistas de personas y entidades solidarias, hasta el momento han repartido más de 700.000 kilogramos de ayuda y se encuentran trabajando para el transporte hasta Ucrania, Siria y Turquía de varios grandes cargamentos de ayuda humanitaria.

Francisco Lirola