Como ya hiciesen la temporada anterior, los futbolistas de la primera plantilla del Polideportivo El Ejido, a través de un comunicado trasladado a la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), han denunciado la grave situación que sufren actualmente bajo el mandato de Alejandro Bouza.

La plantilla ha señalado los impagos, la inexistencia de distintos elementos indispensables para la buena práctica del día a día o el tener que pagar de su propio bolsillo las dietas de desplazamiento, como los grandes escollos en el club ejidense.

En el primero de los casos, a la plantilla ya se le adeudan tres mensualidades y media, algo que consideran “inadmisible”. Hecho al que hay que sumar, además, que el equipo no cuenta con preparador físico o fisioterapeuta, y a los utilleros se le adeudan hasta 10 meses y medio.

Una situación que, en definitiva, se vuelve a tornar oscura para un conjunto celeste que obliga a los jugadores a pagar de su propio bolsillo todos los gastos de comida en los desplazamientos fuera de casa y a no disfrutar de gimnasio, ya que también han incumplido pagos con los propietarios de dicho negocio.

Sin embargo, Bouza continúa sin ofrecer soluciones a una gestión que ha sido un desastre desde el primero de los días. El club debe varias mensualidades de alquiler de los pisos donde residen algunos jugadores, recibiendo los afectados llamadas de los propietarios reclamando dichos pagos, tal y como ya informó este medio hace cerca de un año a través de una entrevista al ex jugador celeste, Agus Passarino.

Así, la burbuja celeste parece cerca de su explosión en medio de constantes rumores de venta. Rumores que el propio empresario, Christian Guerrero, ha confirmado dejando claro que “Bouza no tiene la más mínima intención de vender” una SAD que está cerca de su desaparición. “Mi mano sigue tendida”, señaló el Guerrero en una reciente entrevista ofrecida a Radio Poniente.


F. F. Díaz-Delgado