La semana
pasada pudimos comprobar el gran aprecio de la ciudadanía de El Ejido a la
Policía Nacional en los actos programados en la Plaza Mayor con motivo del 200
Aniversario de la creación de este Cuerpo de Seguridad del Estado.
Por otra parte,
conocimos que el equipo del “desaparecido y ausente” Alejandro Bouza ha sido
sancionado, nada menos que por la FIFA, el mayor organismo a nivel mundial del
fútbol, por el impago de deudas y le prohíbe fichar hasta tanto no regularice
su situación y le sea levantada la sanción.
Esta
comparativa es un claro ejemplo de lo que quieren los ejidenses y aquello de
detestan. La Policía levanta pasiones entre la mayor parte de la ciudadanía y
las muestras de aprecio son constantes, solo baste recordar cuando la Policía a
caballo desfiló en San Marcos y los vecinos vitoreaban continuamente a su paso
agradeciendo su presencia.
Por su parte,
Bouza se ha convertido en un ‘okupa’ de Santo Domingo donde cree que puede
hacer lo que le venga en gana dejando de pagar a futbolistas, cuerpos técnicos
y empleados del club. Se cree que puede torear a quienes se han interesado por
salvar al club cuando él no tiene ninguna posibilidad de hacerlo. Sigue como
gato panza arriba escondiéndose de la prensa, los aficionados, los miembros del
club, los negociadores, sus propios futbolistas, de las instituciones y así un
largo etc.
Mientras todo
esto ocurre, los aficionados que sienten de verdad los colores celestes siguen
sufriendo la vergüenza, el descrédito y la mala imagen de un equipo que se ha
quedado con apenas 17 futbolistas, incluyendo a los sancionados y lesionados, y
sin esperanzas de mejorar por la imposibilidad de registrar nuevas fichas por
parte de la sociedad anónima deportiva del desaparecido Bouza.
El argentino
piensa que alguien le va a ofrecer las cantidades que él quiere y además se va
a quedar con el 51 por ciento de la SAD. Esto no va a suceder, además las
cuentas tienen poca claridad, lo mismo te dicen que la deuda son 700.000 euros
que 1.200.000 euros; falsedad pura y dura.
La única opción
posible es seguir esperando a que las circunstancias conduzcan a este equipo a
no poder presentarse a los partidos por falta de jugadores y que termine
desapareciendo y otro club local ocupe su sitio, pero con gestores más serios y
comprometidos con el municipio.
La otra salida
es simplemente una utopía de soñador frustrado. Sería una verdadera sorpresa
que Bouza se armara de responsabilidad y trajera el dinero necesario para pagar
las deudas que impide a este club actuar con normalidad para no dejar por los
suelos la imagen de un municipio que tiene muchos motivos para ser elogiado.
Desde el propio
club siguen celebrando los empates como si de victorias se tratase, a la vez
que cada mes que pasa indican que “a final de mes tiene que estar todo
solucionado”. No llegan las soluciones, solo llega otro mes más con la caótica
situación descrita un poco más tensa.
En El Ejido
queremos grandes profesionales como los que integran el Cuerpo Nacional de
Policía que se han ganado el aplauso de los vecinos del municipio por su
incansable labor en favor de la seguridad de todos.
¡Felicidades y
a por otros 200 años más!
José Antonio Gutiérrez