El Club Polideportivo El Ejido se ha convertido esta temporada en un campo de minas. La situación parece que llega a su límite cada fin de semana y la plantilla ha dicho basta ante la última sanción sufrida por los impagos al Comité de Árbitros, que ha castigado al club ejidense con dos puntos menos en la tabla y que se suma a las ya levantadas por la FIFA en las que se imposibilita la llegada de nuevos jugadores.

Así, de la mano de dos de sus capitanes, Jaime Lorente y Jesús Godino, junto a su cuerpo técnico, Pumuki Hererida y Radu Varcus; la plantilla que conforma actualmente la Sociedad Anónima Deportiva creada por Alejandro Bouza ha querido explicar su situación en un encuentro con este medio. Un día a día que viven “sabiendo que no te van a pagar” y “sin que nadie te pregunte si necesitas para comer o para gasolina”. “Este año echo de menos hasta que se me mienta”, lamenta Godino.

El club, que cuenta ahora con oficialmente dos puntos menos a la espera de que el recurso presentado por la directiva ejidense sea aceptado tras realizar el pago pertinente a los árbitros, debe afrontar unas semanas cruciales en el futuro de una plantilla que cuenta con cada vez menos fichas profesionales tras las últimas salidas de Pedro Ramírez y Pablo Fernández. “Tenemos 15 fichas del primer equipo, pero con los lesionados ahora mismo somos 10”, recuerdan Radu y Pumuki, que cada semana deben hacer malabares para no incumplir la obligación de mantener al menos siete fichas profesionales en el campo.

“¿Por qué nos llevan siempre al límite?”, se preguntan a diario los jugadores, a los que se le adeudan actualmente tres meses, mientras que esta cifra sube a cuatro en lo que al cuerpo técnico se refiere. “Se supone que puedes salir cuando se te adeudan tres mensualidades, pero al final tienes que acabar negociando con el club la rescisión y eso es difícil cuando no te contestan a las llamadas”.

Una situación extrema que complica aún más la labor de una plantilla que busca desesperadamente la salvación y que, con un nuevo empate en Nerja frente al Málaga City en un partido clave por la lucha del descenso, suma unos 13 puntos provisionales que, si no se le suman los dos perdidos, situarían al equipo penúltimo en la clasificación. “Si nos hubieran pagado y no se hubiera ido nadie, estaríamos peleando por mucho más”, asegura Radu.

POSIBLE VENTA

A pesar de que Bouza ha recalcado a este medio que la viabilidad económica del proyecto está totalmente garantizada, la aparición de Christian Guerrero como posible comprador del club significó una nueva línea de esperanza para la plantilla. Un sentimiento que ha durado poco, ya que la falta de acuerdo entre Bouza y Guerrero ha provocado que este último abandone su posición de interés. “Después de dos meses, y ante la falta de interés por parte de la directiva actual de vender, mi equipo y yo hemos desistido”, anunciaba el empresario a través de sus redes sociales.

Pasividad que Bouza niega totalmente, ya que el propio argentino defiende que estaba dispuesto a sentarse con él a su vuelta de Argentina, lo que será este mismo miércoles. Algo que a la plantilla no le cuadra, ya que “Bouza tenía una reunión con dos personas que estaban funcionando como intermediarias con Christian y se dio la vuelta porque no quería ni escucharla. Ahí explotamos por redes y él ya decidió que todo esta era un complot y un golpe de estado”.

REACCIONES POLÍTICAS

El Polideportivo El Ejido tiene en vilo a un pueblo que ya sufrió una dolorosa desaparición, por lo que las primeras reacciones políticas no se han hecho esperar. En este caso, el PSOE ha sido la primera fuerza política en exigir una actuación ante los impagos del club ejidense.

Según Desiderio Enciso, responsable de Política Municipal del PSOE ejidense, “a una sociedad que no está cumpliendo con sus obligaciones y que está dañando la imagen del municipio de El Ejido, habría que exigirle al menos que presente un plan de viabilidad financiera a corto plazo y, si no lo presenta, habría que retirarle el uso de instalaciones deportivas municipales”.

Desde el Partido Socialista han lamentado, además, “la pésima imagen que está dando el club que lleva el nombre del municipio de El Ejido y que ya ha saltado incluso al ámbito nacional”. “El Polideportivo Ejido está dañando muy gravemente la imagen de nuestro municipio, y la administración pública no puede seguir colaborando con esta empresa si no hay ninguna garantía por su parte de que la situación va a cambiar a corto plazo”, han señalado.

FIN DE ENERO, CLAVE

En definitiva, la situación actual ha traspasado lo estrictamente deportivo y todo el pueblo de El Ejido sigue al día una historia que debería tener cerca su final.

Con Alejandro Bouza negando totalmente cualquier riesgo de desaparición, mientras que desde dentro del club aseguran que un equipo externo ya trabaja en fichajes para antes del 31 de enero, la plantilla pide auxilio ante un futuro incierto en el que “cada día hay una bomba”. “No sabemos si mañana vamos a competir, si nos van a eliminar de la competición o si nos van a llamar para cobrar”.

Rumbo que cambiaría según el resultado de un viaje a Argentina en el que el presidente busca la llegada de nuevos inversores que ayuden a salvar un barco con cada vez menos tripulantes.

F. F. Díaz-Delgado