Noticias oficiales al respecto no hay, pero redes sociales como Tik Tok
están emitiendo continuamente vídeos en los que se está informando de cuáles
son los motivos de la marcha de estas empresas de nuestro país.
Al parecer, las causas que han dado lugar a la marcha de estas
empresas son varias y todas ellas de tipo económico. Así, por ejemplo,
los transportes de contenedores han incrementado su precio de tal manera que
muchos de los productos que llegan a España lo hacen de forma muy encarecida
con lo cual la famosa competitividad de los artículos baratos de los chinos está
desapareciendo por momentos.
Por otra parte, la gran guerra que se ha generado en torno a los
aranceles está poniendo en duda la continuidad de las empresas chinas
desplazadas desde suelo local.
Si nos centramos en territorio español, también hay otros
inconvenientes que están afectando al negocio de estos empresarios orientales.
Así pues, el incremento de los alquileres que se está dando en nuestro país
está afectando de una forma extraordinaria a la rentabilidad de estos
importadores.
Finalmente, la venta por internet también ha sido un grave inconveniente
al que no pueden hacer frente. Plataformas como ‘Temu’ están vendiendo a unos
precios inalcanzables para la mayor parte de los bazares y no parece ser moda
de un día, el público se está acostumbrando a estos pedidos por internet.
No sabemos hasta qué punto las ganas de marcharse de los empresarios
chinos ha llegado hasta las tiendas que tenemos en nuestro entorno. Sin
ir más lejos, en Santa María del Águila ya hay un bazar que ha cerrado
definitivamente, no sabemos si el resto de los establecimientos que hay
distribuidos por el municipio harán lo mismo, tampoco sabemos con certeza el
motivo del cierre.
Por otra parte hay que significar la expansión de muchos
establecimientos por parte de migrantes establecidos en el Poniente almeriense
cuya apertura no parece tener mucho significado. No obstante, la libertad para
establecer este tipo de comercios les permite poder hacerlo. No se
entiende la proliferación de peluquerías que están surgiendo y todas ellas o
casi todas son creadas por profesionales de origen magrebí. En este mismo
orden de cosas, tampoco se comprende el sentido que tienen los pequeños
establecimientos de artículos de alimentación sabiendo el enorme poder que
tienen grandes supermercados como Mercadona o Lidl, ambas cadenas muy bien
representadas en toda la comarca de Poniente.
Da la sensación de haber retrocedido en el tiempo y estar viviendo una
revolución en el sector del comercio local que choca muy frontalmente con la
evolución que vienen demostrando los grandes centros comerciales.
Cabe pensar en una futura crisis de estos establecimientos una vez que
los extranjeros asentados y nacidos en suelo español adopten los centros
comerciales como los lugares ideales para efectuar sus compras.
D-CERCA