El Juzgado de lo Penal n.º 2 de Almería ha condenado a un hombre a pagar una indemnización de más de 111.000 euros por agredir a un guardia civil que intentó detenerlo tras asaltar dos viviendas en Matagorda, según trasladan a D-CERCA desde la Asociación Pro Guardia Civil (APROGC).
Como refleja la sentencia, a la que ha tenido acceso este medio, los hechos tuvieron lugar el pasado 21 de noviembre de 2020, sobre las
11:00 horas, cuando el guardia civil sorprendió al condenado, y a un cómplice que no ha sido identificado, destrozando la ventana de una casa del citado núcleo ejidense y entrando en ella "con ánimo de sustraer los objetos de
valor que pudiesen existir". Desde el terrado de ese domicilio el asaltante saltó a otro vecino y, tras romper una claraboya, accedió a su interior.
Fue en ese momento cuando llegó la Guardia Civil, y los rateros, al percatarse de su presencia, comenzaron la fuga. El acusado fue interceptado en la parte trasera de la vivienda, pero recibió un fuerte empujón que le provocó la fractura conminuta de la cabeza del radio izquierdo y la fractura de apófisis
coronoides tipo I de cúbito desplazadas, entre otras lesiones. A pesar de eso, logró detenerlo.
Ante estos hechos, el Juzgado de lo Penal n.º 2 de Almería ha decretado la condena para el acusado como autor de un delito
continuado de robo con fuerza y otro de robo en casa habitada en grado de tentativa, además de un
delito de atentado a agente de la autoridad y de lesiones. Además de los 111.845,58 euros de indemnización para el agente herido, también tendrá que pagar una multa de doce meses a razón de cuatro euros diarios. El magistrado también ha decretado una pena de un año y ocho meses de prisión por atentado a la autoridad y otros seis meses por las heridas provocadas, aunque no tendrá que entrar al carecer de antecedentes previos.
Casi se queda sin indemnización
El Guardia Civil herido, además de la fractura conminuta de la cabeza del radio izquierdo y la fractura de apófisis
coronoides tipo I de cúbito desplazadas, también sufrió el desgarro de ligamento lateral externo de codo
izquierdo. Esto provocó que necesitara someterse a varios tratamientos para su recuperación: el implante de una férula antebraquial, una intervención quirúrgica para la reducción de fracturas,
material de osteosíntesis y reconstrucción de ligamento, rehabilitación y otra nueva intervención
con extirpación de cabeza de radio izquierdo, neurólisis y artrólisis.
Tuvieron que pasar 473 días para su recuperación, que no ha sido completa, ya que desde entonces padece secuelas como una limitación de movilidad sistema escapular y hombro, artrosis postraumática y
hombro doloroso y un trastorno neurótico, entre otras dolencias físicas y mentales.
Aunque el reconocimiento judicial de la indemnización se alcanzase en septiembre de 2023
gracias a la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal n.º 2 de Almería, el agente no ha podido
recibir la compensación económica que allí se declaraba hasta fechas recientes debido a que el
condenado se declaró insolvente.
"El hecho de que el agresor demostrase su incapacidad para
cumplir con sus obligaciones financieras provocó que tuviésemos que reclamar la cuantía
indemnizatoria a la Administración General del Estado en base a la normativa específica de
cobertura a miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado", explica Fran Peláez,
abogado de PenalTech y responsable de la asesoría jurídica de APROGC.
"Desde el inicio, este asunto nos ha exigido mucha dedicación y esfuerzo en el despacho",
comenta el letrado. "El caso se archivó en instrucción y, tras lograr la sentencia
favorable a los intereses de nuestro cliente, nos tuvimos que enfrentar al obstáculo de la declaración
de insolvencia del condenado", añade. "Sin embargo, la Administración ya ha abonado la
cuantía íntegra al agente y, ahora sí, junto al incansable apoyo de la Asociación, podemos
evidenciar nuestra satisfacción total al confirmar que el asociado ya ha sido resarcido conforme a
la resolución judicial dictada en 2023", concluye el letrado.
Francisco Lirola