Voluntarios de Equinac atendieron el varamiento de un delfín común en Roquetas de Mar. El animal, que llegó en la noche del pasado 13 de julio, se encontraba en muy mal estado de salud, tenía heridas en la cabeza y padecía insuficiencia respiratoria cuando lo hallaron. Se trataba de un ejemplar adulto de delfín común macho, de casi dos metros de envergadura.

Previo a la llegada de la asociación, especializada en la protección de cetáceos y tortugas marinas, la Policía Local y una veterinaria de la administración habían tratado de devolverlo al mar en tres ocasiones, regresando él siempre en tierra. Emilio Gull, veterinario de Equinac, junto con dos miembros veteranos de su red de varamientos, llegaron al lugar, y tras una valoración clínica "y estando ya el delfín agonizando", decidieron "no alargar más su sufrimiento", procediendo a su eutanasia.
Como explican desde la asociación, cuando estos animales varan solos, "no hay que reintroducirlos", ya que lo hacen "por una razón, están enfermos y no han podido seguir a su grupo". Y es que los cetáceos, como los seres humanos, son mamíferos que necesitan aire para respirar, "cuando varan es porque no pueden mantenerse a flote", impidiéndoles coger aire. "Al reintroducirlos, se consigue el mismo efecto que en el caso de una persona que, tras estar ahogándose en el mar, logra llegar a la arena y alguien la volviera a meter en el mar".

Dese Equinac transmiten sus agradecimientos a Enrique Fernández, director del Aquarium Costa de Almería, la Policía Local roquetera "que estuvo en todo momento con nosotros", a sus compañeros Isa y Emilio y al veterinario de la asociación, también llamado Emiio, "por ayudar a este delfín", y a todas las personas que ayudaron a mantener al animal "húmedo y fuera del agua".
En caso de ser testigo del varamiento de un cetáceo o tortuga marina en la costa, lo primero que se debe hacer es alertar a Emergencias 112, que se encargará de avisar a los técnicos especialistas en atender a estos animales. Nunca se debe intentar reintroducir en el agua, solo asegurarse de que se mantengan a flote para que puedan seguir respirando.
Francisco Lirola