El Gobierno ejidense reconoce la contribución social y cultural al desarrollo de El Ejido de cuatro vecinos que pondrán nombre a varios espacios públicos

El Gobierno ejidense reconoce la contribución social y cultural al desarrollo de El Ejido de cuatro vecinos que pondrán nombre a varios espacios públicos

El alcalde alaba la importante labor desarrollada en vida por San José María Rubio, Lola Callejón, Ana María Callejón Giménez y Rosario Martín Fornieles, que "con su entrega y tesón ayudaron a hacer de nuestro municipio lo que hoy es".
Varios espacios públicos del municipio llevarán muy pronto el nombre de cuatro destacados vecinos de El Ejido y es que el gobierno local ha querido reconocer la importante contribución social y cultural al desarrollo de la localidad que realizaron en vida San José María Rubio, Lola Callejón, Ana María Callejón Giménez y Rosario Martín Fornieles.

El alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, ha explicado que "se trata de un merecido reconocimiento público a la importante labor desarrollada por estos célebres vecinos del municipio que, con su trabajo, entrega y tesón, han ayudado a hacer de El Ejido lo que hoy es". De esta manera, el regidor ejidense ha insistido en que "esta muestra de gratitud representaba, por tanto, un deber para esta administración; el reconocer, honrar y agradecer el trabajo y los méritos de todos ellos al contribuir, de manera muy generosa, a la mejora, desarrollo y crecimiento del municipio, siempre haciendo gala de valores tan importantes como la constancia, el esfuerzo y la honradez".

Tal es así que las nuevas denominaciones de estos espacios públicos, tres calles en El Ejido y un parque en Balerma, se realizarán una vez sean aprobadas en Pleno, el próximo martes, por toda la Corporación Municipal. "Un destacado agradecimiento colectivo de la sociedad que, a la vez, sirve de estímulo y ejemplo al resto de la ciudadanía", ha remarcado Góngora.

Uno de los reconocimientos que realizará el gobierno local será el cambio de nomenclatura de uno de los parques de Balerma, que pasará a llamarse 'Parque de San José María Rubio Peralta', en memoria de este hijo de agricultores de la zona, proveniente de una familia muy sencilla, humilde y trabajadora y que, como ha destacado el alcalde de El Ejido, ha sobresalido "por su profundo amor a los pobres y por su importante obra evangelizadora que le llevó a su canonización, en mayo de 2003 por el papa San Juan Pablo II".

Tal y como ha recordado Góngora, "la relación del 'Padre Rubio' con El Ejido no sólo viene dada por la agricultura, sino también por sus largas estancias en Balerma donde residía con su familia en una casa situada junto al paseo marítimo de la Torre y de la que aún queda en la actualidad una pequeña fachada, además por sus visitas periódicas a la ermita que existiera hace más de un siglo junto a la actual iglesia parroquial de San Isidro".

En el caso de la profesora de música y fundadora de la Coral de El Ejido, Lola Callejón, el regidor ejidense se ha referido a ella como "una de esas vecinas que serán recordadas por las generaciones venideras, ya que ha destacado por haber dinamizado, de manera muy importante, la cultura en el municipio en todas sus vertientes". "Era una mujer que ponía toda su fuerza en trabajar por lo que le gustaba, por lo que amaba; la música, el teatro y la enseñanza. Fue un mujer muy valiente, muy volcada con el municipio y que, desde luego, tendrá un lugar privilegiado en la historia cultural del que fue su pueblo", ha remarcado Góngora.

Ana María Callejón Giménez, fundadora de la 'Asociación de Amas de Casa y Consumo Familiar Virgen del Carmen', será otra de las célebres ejidenses que darán nombre a una calle. "Fue una mujer adelantada a su tiempo, pertenecía a esa generación que no fue mera observadora del progreso de El Ejido, sino que contribuyó activamente a favorecerlo", ha subrayado de ella el regidor municipal, quien ha asegurado que "el amor a su pueblo y la inquietud por su desarrollo la llevaron a participar activamente en la banda de música, el conservatorio o la asociación Prosalud".

Gran defensora de su pueblo, trabajó duramente para poner en marcha la guardería infantil dentro de la asociación, consiguió equipamientos para la iglesia parroquial de San Isidro y contribuyó a la puesta en marcha de la primera cabalgata de Reyes, a la creación del grupo de mayorettes y trabajó intensamente con Cruz Roja en el municipio.

Como una "ardua defensora de la unidad total del antiguo municipio" ha calificado el primer edil ejidense a Rosario Martín Fornieles, para quien fue siempre un referente en su vida la conexión entre El Ejido y Celín, su pueblo natal. "Mantuvo como objetivo el expreso deseo de acortar caminos, de tender puentes y de hermanar ambas comunidades, pues amaba a El Ejido como suyo y llevó un soplo de esperanza a los más necesitados con el don especial de ofrecer palabras de aliento a enfermos y personas necesitadas", ha incidido Góngora.

Esta destacada ejidense amaba profundamente la cultura de la tierra, de manera que en la década de los años 40 formó parte de un grupo de teatro que llevó sus representaciones por núcleos como El Ejido y Las Norias de Daza, junto a incipientes artistas como el célebre Manolo Escobar.

Cabe recordar que todos estos hechos le valieron a estas tres mujeres la concesión del premio 'Porcia Maura', en la primera edición de estos galardones municipales, en septiembre de 2014. De manera que el Ayuntamiento de El Ejido en señal de agradecimiento de todo un municipio por su constante y desinteresada colaboración para enriquecer el patrimonio social, cultural y religioso del municipio ha decidido honrar y agradecer los servicios, méritos y acciones de estos cuatro vecinos, personas que representan un ejemplo para generaciones futuras.