La investigación comenzó a finales del mes de agosto a través de una denuncia de un matrimonio que estaba siendo amenazado y extorsionado. Un grupo de personas que se dedicaban al mismo negocio que ellos, la compra venta de coches de segunda mano, quería evitar así la competencia.
En las primeras indagaciones, los agentes comprobaron que los presuntos autores de los hechos denunciados eran un grupo de personas dedicadas a colocar turismos que vendían en los lugares más visibles de los aparcamientos públicos de la ciudad.
A lo largo de las investigaciones, se pudo determinar que se trataba de un grupo organizado de origen rumano, algunos de cuyos componentes residían en la provincia de Almería y otros se desplazaban desde la comunidad autónoma de Extremadura, exigiendo a las víctimas ciertas cantidades de dinero para poder realizar la actividad y, al mismo tiempo, les amenazaban si no cumplían con lo exigido. Los ahora detenidos no dudaban en perseguir a sus víctimas, agredirlas y golpear los vehículos que ponían a la venta cerca de los suyos.
Durante el transcurso de la investigación, el pasado 17 de septiembre, una llamada a la sala 091 advertía a los agentes de una reyerta en un aparcamiento público situado en la Avenida del Mediterráneo. Rápidamente, una dotación policial socorrió al matrimonio que había sido nuevamente agredido, observando también los daños que habían ocasionado en el coche que las víctimas intentaban vender.
Inmediatamente, los investigadores establecieron un dispositivo policial que culminó con la detención de los once presuntos autores de los hechos.
La investigación ha sido llevada a cabo por agentes de la Brigada de Policía Judicial en colaboración con agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Comisaría Provincial de Almería.