La Fura dels Baus protagonizó el viernes en El Ejido el estreno nacional de 'ADN' cargado de escenas brutales, enérgicas y transgresoras

La Fura dels Baus protagonizó el viernes en El Ejido el estreno nacional de 'ADN' cargado de escenas brutales, enérgicas y transgresoras

El fuego, el agua, el polvo y la sangre estuvieron presentes a lo largo de la representación como una forma de reivindicación de la sociedad actual. 

La 40 edición del Festival de Teatro de El Ejido se convirtió el pasado viernes en el marco elegido por la Fura dels Baus para estrenar en España su última creación, 'ADN', que, además, repitió el sábado para que nadie se quede sin disfrutar de una representación única marcada por la originalidad a la que ya nos tiene acostumbrados la compañía.

De esta manera, la programación del Festival entró en su recta final y lo hizo a lo grande, con un montaje en el que este grupo teatral regresa a sus orígenes con escenas brutales, cargadas de energía y vitalidad, que captaron en todo momento la atención del público. El espectador, en pie, se convirtió en parte importante de la representación, viviendo en primera persona y de una forma muy directa la selección de las mejores escenas del leguaje 'furero' que la compañía ha realizado para este trabajo y con las que regresa a sus orígenes.

La total ausencia de tecnología y la vuelta a lo analógico marcaron un espectáculo que podría definirse de transgresor, donde no importó manchar al público con polvos de colores, verter agua, destruir un coche o devorar vísceras de animales para dibujar un show donde la dramaturgia rítmica, la plasticidad y el sentido lúdico crearon una corriente de energía que sorprendió y emocionó al público. 

Y es que cabe recordar que, tal y como explicó el director creativo de La Fura, Jürgen Müller, "se trata de una retrospectiva que nace de la necesidad de reivindicar una experiencia directa de participación, catarsis y estética, tan lejana en los tiempos tecnológicos y virtuales en los que vivimos. 'ADN' transgrede el status quo reinante, sacudiendo al público y sumergiéndolo en un espectáculo total".

Con este trabajo innovador, la compañía ha querido ofrecer una oportunidad a las nuevas generaciones para que puedan experimentar una vivencia directa de las cosas, alejada del mundo tecnológico que nos mantiene fuera de la esencia emocional de las cosas.

Es la quinta ocasión que la Fura participa en el Festival de Teatro de El Ejido, siendo la primera en 1996 con la obra ‘Manes’; posteriormente, en 2004, con ‘Matria’, en el barco Naumun, que durante días permaneció anclado en el Puerto Deportivo de Almerimar; en 2008, con ‘Imperium’; y la última ocasión en 2014, con ‘Res’’.

La compañía ha pasado de ser un grupo de actores ‘callejeros’ a tener fama y reconocimiento internacional. Se inició como grupo de teatro de calle en Cataluña a finales de los años 1970, haciendo pasacalles y participando en fiestas. Se autodefinen como un grupo de teatro ‘de fricción’, que busca un espacio escénico distinto del tradicional, sus montajes y productos diversos han evolucionado mezclando imaginación, morbosidad, performance, mecatrónica e instalaciones de gran espectacularidad, en un contexto dramático de creación colectiva. Su amplia trayectoria suma hasta el momento cerca de tres mil representaciones y alrededor de tres millones de espectadores.