Uno de los socios y sus familiares protagonizaron un enfrentamiento con el gerente de la galería, que terminó el pasado martes en el Juzgado de Instrucción nº1 de El Ejido.
La última Junta General Ordinaria y Extraordinaria de la sociedad Comerciantes del Poniente S. A. (COPO), celebrada el pasado 20 de junio, terminó con una pelea en la que se vieron implicados, en un primer momento, el gerente de la galería, Raúl Felices, y el hijo y la esposa de uno de los accionistas del centro comercial ejidense, Tomás Sánchez. Según relató este último en declaraciones a D-CERCA, “estábamos en ruegos y preguntas y yo había preguntado por la compra de una nave y sobre unas facturas”. Entonces, “Raúl Felices abandonó la sala -la Junta General se estaba celebrando en la sala 5 del cine- para abrirle la puerta a algún socio y, cuando venía para acá, insultó a mi mujer y a mi hijo”. Sánchez explicó que, en un primer momento, “yo no me di cuenta”; sin embargo, segundos más tarde, “oímos gritar a mi mujer”. “Salgo corriendo y, cuando llego arriba, estaban Miguel Felices, Raúl Felices y el otro -por Miguel Felices Daza, expresidente y actual consejero de COPO-, los tres enganchados con mi mujer y con mi hijo y subimos los otros socios”.
Según recoge la declaración realizada por la propia esposa de Tomás Sánchez al interponer la denuncia, una vez que se encontraban su hijo y ella misma “en el rellano de los cines, el hermano de Miguel Felices Sánchez, llamado Raúl Matías, comenzó a increpar a los dicentes por las preguntas realizadas a su hermano, teniendo él mismo un estado muy violento”. “Posteriormente, Raúl Matías propinó un puñetazo en el rostro a Tomás Manuel y a Encarnación”. La declaración realizada por Tomás Sánchez, que también interpuso denuncia, recoge que, al intentar mediar en la disputa, “fue agredido, recibiendo un fuerte puñetazo en la mandíbula, no llegando a ver quién fue el agresor”.
A las denuncias interpuestas tanto por Tomás Sánchez como por su hijo y su esposa hubo que sumar la interpuesta por Raúl Felices y, finalmente, el juicio rápido celebrado en la mañana del pasado martes, 27 de junio. En él, y según confirmó Sánchez a este periódico, ambas partes llegaron a un acuerdo, en concreto, e instados por la jueza del Juzgado de Instrucción número 1 de El Ejido, a lo que todos llamaron un “pacto de caballeros”. Sin embargo, Sánchez afirmó que “esto no ha hecho más que empezar”. Este accionista está convencido de que el detonante de la pelea fueron sus cuestiones durante el turno de ruegos y preguntas y criticó que “les hemos requerido documentación y no nos la dan”.
A los tribunales
Precisamente por ello, Sánchez junto con otros 15 accionistas que suman algo más del 22% del total de acciones de COPO presentaron en la última Junta General una solicitud de agrupación de acciones para poder designar dos miembros para el Consejo de Administración, tal y como les correspondería por el método de representación proporcional.
Asimismo, este grupo de accionistas ha decidido exigir por la vía judicial la información que, según lamentan, “a través de la Asamblea General no podemos conseguir”. En este sentido, están preparando una querella que, en breve, llegará a los juzgados y a través de la que exigen que se les facilite información sobre determinadas operaciones llevadas a cabo por la actual directiva de COPO que cuenta, en cualquier caso, con un respaldo mayoritario del resto de accionistas.
Este periódico se puso en contacto con Miguel Felices Daza, consejero de COPO y padre de los actuales presidente y gerente de la galería, que declinó hacer declaraciones.
El Centro Comercial COPO se inauguró a finales de 1996 y, hace apenas unos meses, abrió al público su nuevo ‘Paseo de la moda’, un espacio que aglutina algunas de las mayores firmas actuales. El contrapunto sigue siendo, sin embargo, el cierre de los cines desde finales de 2016.
Isabel Fernández