Una fuerte tromba de agua deja durante horas sin servicio la carretera que une Las Norias con San Agustín

Una fuerte tromba de agua deja durante horas sin servicio la carretera que une Las Norias con San Agustín

Una fuerte tromba de agua dejó durante toda la noche y parte de esta mañana sin servicio la carretera que une los núcleos de población ejidenses de San Agustín y Las Norias. El Ayuntamiento de la ciudad comenzó las labores para permitir el acceso a la vía a primera hora.

En torno a las 20.00 horas una fuerte tormenta descargó gran cantidad de agua en pocos minutos en este núcleo ejidense, lo que provocó que la vía quedara abnegada por el agua, dificultando el tránsito de vehículos. Desde ese instante el alcalde, Francisco Góngora, el presidente de la Junta Local de San Agustín, Francisco Pérez, y los concejales de Obras Públicas, Mantenimiento y Servicios, y de Agricultura, José Andrés Cano y Manuel Gómez, estuvieron en contacto para coordinar los trabajos. 

Técnicos municipales y maquinaria de la empresa pública DUE han llevado a cabo todas las actuaciones necesarias para retirar los arrastres de tierra y barro, así como para achicar el agua acumulada. 

Precisamente, para evitar estos problemas que se generan ante la llegada de fuertes lluvias se va a ejecutar el proyecto de adecuación y arreglo de esta vía, con una inversión de 675.000 euros e incluido dentro del Plan de Caminos de la Diputación de Almería. Unos trabajos que consistirán básicamente en la sustitución del firme de toda la calzada, que cuenta con unos 8 kilómetros de longitud, para favorecer así las condiciones del tráfico. Además, se le dotará de arcenes pavimentados que permitirán el tránsito peatonal y se construirán cunetas donde sea necesario.

A todo ello, se sumará el acondicionamiento de la parcela en la que se acumula el agua de lluvia como zona de drenaje y que evitará así los encharcamientos que se producen, como el ocurrido en la tarde de ayer. En la zona contigua a la parcela donde se va a realizar el drenaje se procederá a escarificar el firme existente para formar una nueva rasante adecuada para la evacuación de la escorrentía superficial.