El Ayuntamiento de El Ejido y la
empresa Frutilados del Poniente han donado 50.000 kilos de alimento a las
explotaciones ganaderas de Sierra Bermeja, mostrando así su apoyo a la zona
afectada recientemente por el incendio que ha provocado la calcinación de casi
10.000 hectáreas y se ha cobrado la vida de un bombero almeriense del Infoca,
Carlos Martínez.
El concejal de Agricultura
y Medio Ambiente del Ayuntamiento de El Ejido, Francisco Pérez, ha explicado
que “miles de animales se han quedado sin fuente de alimentación debido a las
consecuencias devastadoras de las llamas en su hábitat natural, de ahí que
hayamos promovido esta iniciativa con el fin de facilitarles este
avituallamiento para garantizar que puedan comer a través del ensilado que se
produce en Frutilados que presenta una excelente calidad y es muy rico en
nutrientes”.
La mercancía se ha
trasladado desde las instalaciones de Frutilados en El Ejido hasta la
Cooperativa Maderera del Genal, que ha sido cedida por el Ayuntamiento de
Algatocín, hasta donde han llegado los dos tráilers que han transportado las
bolas de ensilado de 500 kilogramos cada una.
La
donación ha sido recibida por el delegado territorial de Agricultura, Ganadería
y Pesca de la Junta de Andalucía en Málaga, Fernando Fernández Tapia-Ruano, junto
al alcalde de Algatocín, José Manuel López, que han agradecido este gesto
solidario tanto del Ayuntamiento como de Frutilados del Poniente.
Francisco
Pérez ha subrayado que “es una donación del pueblo de El Ejido ya que es el
momento de ayudar a estos ganaderos que tan mal lo están pasando”.
El edil ha dado a conocer
el funcionamiento de la Planta de Frutilados del Poniente que es un proyecto
pionero de sostenibilidad y economía circular impulsado desde el Ayuntamiento
con el respaldo y participación de empresa del sector agro que transforma los
excedentes de las frutas y hortalizas en alimento de gran calidad para el
ganado a través de la técnica de ensilado. Tiene una producción actual que
genera alimento para 13.000 cabezas de ovino-caprino para todo un año o 2.000
cabezas de vacuno. En un futuro se multiplicará la capacidad de la planta hasta
alcanzar una producción de 130.000 Tn/año para alimentar a 67.000 cabezas de
ovino-caprino o a 11.000 de vacuno en un año.
Pérez ha puesto de relieve
que desde el Ayuntamiento “el camino a seguir es el de apostar por la economía
circular para continuar en la senda de la sustitución del modelo productivo
lineal por otro circular donde se logre un mejor aprovechamiento de los
recursos y se dé una vida útil a lo que, a priori, podrían considerarse
residuos”.