La mañana del pasado domingo la asociación Equinac acudió al núcleo ejidense de Guardias Viejas para atender al varamiento de un delfín.
Según traslada la propia asociación dedicada a la protección de cetáceos y tortugas marinas, el primer aviso por este suceso llegó a las 8:00 horas del 19 de mayo. En él, les alertaban de que el animal ya había varado dos veces en la playa, y que un joven había tratado de devolverlo al mar otras tantas, pero este seguía rondando la costa, acabando en una zona rocosa de difícil acceso.
El ejemplar varado se trataba de un delfín listado juvenil, "tenía muchos parásitos, heridas en el morro y estaba muy cansado", apuntan desde Equinac, tampoco se percibían en la cercanía a su madre ni a su grupo, y no dejaba que se acercara el grupo de voluntarios desplazado hasta el lugar, incluyendo a Agustín, Paqui, Lidia y la coordinadora de la asociación, Eva Morón.
A pesar de contar con la presencia de la Policía Local y de un agente de medioambiente, los animalistas carecían de cualquier medio para acercarse al cetáceo, y les habría sido imposible de no llegar a disponer de la ayuda de varias personas para mantener localizado al animal, incluyendo a dos jóvenes que, con tablas de surf, pudieron acercarse al delfín y dirigirlo a una zona de arena para evitar que se provocara más daños en las rocas.
Sin embargo, todos estos esfuerzos no pudieron evitar que el delfín listado acabara por bordear la costa hasta perderse de la vista de los voluntarios y colaboradores.
Esperar a Emergencias
Desde Equinac recuerdan que, ante el varamiento de un cetáceo o tortuga marina, los testigos nunca deben tratar de reintroducir al animal. En este caso, la actuación del joven que trató de devolver al delfín al mar provocó que este se apartara a una zona de difícil acceso en el que sufrió nuevas heridas.
"Cuando estos animales varan en las playas", explicaba Eva Morón a D-CERCA, "es porque están muy agostados y enfermos" y, cuando son devueltos directamente a su hábitat, "los estamos abocando a una muerte por ahogamiento" ya que los cetáceos, que no son peces, respiran aire como todos los mamíferos.
Por ello, ante casos como este, los animalistas recomiendan dar aviso al teléfono de Emergencias 112 Andalucía, y esperar a la llegada de los agentes ambientales y especialistas
Sin medios
En un comunicado publicado en sus redes sociales, la protectora de cetáceos y tortugas marinas ha denunciado la falta de medios que padecen para atender en este tipo de casos. "No contábamos con ningún medio en el agua, como una zodiac o una piragua", remarcan, "solo nuestros neoprenos y muchísima voluntad". En declaraciones para este medio, la coordinadora de Equinac asegura que "ninguna administración pone nada para esto".
Aun en estas condiciones, la asociación a querido dar las gracias " la Policía Local de El Ejido, por comprobar la situación del aviso; a Iván y Estela, a Carlos y Santi, por la paliza que se han dado intentando evitar que el delfín se golpeara contra las rocas y, cómo no, a nuestros pedazo de compañeros".
Francisco Lirola