La información diaria nos conduce la vida por senderos insospechados

La información diaria nos conduce la vida por senderos insospechados

La sucesión de acontecimientos diarios nos dirigen una vida que no teníamos programada así. Digo esto porque parece como si las guerras de Ucrania y Palestina hubiesen desaparecido de golpe


Hace 15 días estábamos continuamente hablando de la masacre que se estaban produciendo los territorios ocupados de Palestina y estamos viendo la posibilidad de que hubiera un acuerdo de paz entre ucranianos y rusos gracias a la intervención de Donald Trump.

Todo eso ha cambiado radicalmente una vez que el presidente americano diseñó en su mente una estrategia supuestamente para controlar la deuda pública que tiene Estados Unidos en el inicio de su segundo mandato. Aparece de golpe la palabra más repetida en los últimos días: aranceles, a partir de ahí todo el mundo empieza a hacer números a ver cómo este impuesto nos va a afectar a cada uno, porque dicho sea de paso, todos estamos pensando siempre en aquello que nos va a afectar al bolsillo.

No sabemos realmente el hecho o acontecimiento siguiente cuál va a ser a nivel local, en España nos hemos olvidado durante unos días de Begoña Gómez, de Koldo, de Ábalos, de las novias, de la guerra de Sumar y Podemos, de la falta de presupuestos y de un sinfín de cosas más que era el pan nuestro de cada día hace apenas días.

Por otra parte, aquellas previsiones que hicimos no hace mucho tiempo tampoco se han producido. Pensábamos entonces que el cambio climático iba a traer sequía y de momento lo que ha traído es un exceso de precipitaciones atípicas que no las teníamos previstas y han vuelto las inundaciones en parte del país.

Por otra parte, vaticinábamos una subida desmesurada del petróleo que no se ha producido y ha pasado exactamente lo contrario. Y de los coches eléctricos, mejor que ni hablar, parecía que a Elon Musk le había tocado la lotería con la presidencia de Donald Trump y sus coches se iban a vender como rosquillas y ha pasado justo lo contrario.

Con la globalización, el día a día se ha convertido en una aventura diaria que no se puede predecir. Todo esto nos afecta y no ponemos medios para mantener una salud mental en un estado óptimo. Posiblemente había que analizar todo esto y revisar la forma de percibir la información y sus consecuencias.

No obstante, no podemos olvidar que los medios de comunicación viven de la audiencia y muchas veces la información que nos dan no es la que más nos interesa a nosotros, es más bien la que más le interesa a ellos, con lo cual posiblemente habría que aprender hacer un escaneo de todo aquello que percibimos a diario para tener una visión global de nuestro día a día, que realmente nos importe.



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